Semana Santa Chiquita de Puente Genil.

15.04.2012 11:19

El día 3 de Mayo, se celebra tradicionalmente en Puente Genil el día de la Cruz, lo que equivaldría al Viernes Santo y toda la semana que arropa a dicho día, se conoce como Semana Santa Chiquita; una versión infantil de la Semana Santa Mayor Pontana. Pioneros en España para la celebración de dicho evento, hoy día son varios los pueblos de la zona que también se unen a la celebración, Aguilar de la Frontera, Montilla, Bujalance, Lucena, esta última desde inicios de 1800 con la que existe un acuerdo de hermanamiento desde el pasado 10 de Abril de forma que una representación de la Semana Santa Chiquita de Puente Genil con sus figuras bíblicas participen en la próxima edición de los desfiles procesionales infantiles de  Lucena a la vez que dos pasos procesionales lucentinos junto a la Hermandad de Tambores de Lucena participen en la celebración pontanesa el próximo día 1 de mayo. 

A lo largo de esta semana, los niños se erigen como protagonistas y pasan a ser el centro de atención de una celebración que si bien, desde siempre ha sido organizada y estructurada por los padres, si que a petición de éllos, los peques. De esta forma, ponen en escena todo lo que ha acontecido durante la Semana Santa Grande y son muchos y cada día más, los desfiles y salida en procesión de figuras y pasos de las distintas cofradías. Pasos entre los que están: La Virgen de la Guía, “La Borriquita”, Jesús de las Penas y LaVirgen de los Ángeles, La Santa Cena y La Virgen del Amor, El Calvario y Nuestra Señora del Consuelo, El Lavatorio, El Huerto, La Humildad, La Amargura, Nuestro Padre Jesús amarrado la Columna, Jesús Preso, La Esperanza, Jesús Nazareno, El Cristo de la Misericordia, San Juan Evangelista, La Virgen de los Dolores, El Cristo de la Buena Muerte, La Virgen de las Angustias, La Soledad, El Santo Sepúlcro y concluyendo el domingo, con la salida en procesión matinal de la Cofradía de Jesús Resucitado, acompañado por todos los participantes de la semana Santa Chiquita y emulando así al gran desfile procesional de la Semana Santa Mayor de Puente Genil del Domingo de Resurrección.

No solo son los pasos o tronos los que componen la Semana Santa Chiquita, si no que al igual que en “la Grande”, un sinfín de “figuras con sus rostrillos y martirios” acompañan en desfile procesional. Quizá uno de los grupos más lucido por su número y colorido, al igual que en la Semana Santa Grande, sea el Imperio Romano, acompañado y amenizado por su banda de música, al paso de la que desfilan a sus anchas arriba y abajo durante todo el desfile procesional. Las demás figuras, son representaciones de lo que fueran personajes bíblicos, apóstoles, romanos y demás, que cubren sus caras con caretas o rostrillos fabricados a base de escayola y pintados emulando las caras del personaje bíblico que representan y visten con bonitas túnicas de raso  y bordados en oro y plata, portando sus martirios, que son representativos y característicos a cada personaje; el gallo, la serpiente, el templo, etc…Y como son más los niños para “vestirse” que el número de figuras existentes, se pone en marcha el sistema de turnos, de forma que cada tramo o tiempo, se van cambiando las túnicas y demás para poder disfrutar todos por igual; y al que no le toca este año,… el que viene. Y ahí la tradición de un fuego que se enciende y ya nunca se apaga en el interior de cada uno. Después a “los grupos”, sedes sociales o cofradías de cada cual en la que ya se remata con el avituallamiento para retomar fuerzas, comida y refrescos.

Los orígenes de la fiesta infantil, se remontan a finales del siglo XlX  cuando aún nuestro pueblo no tenía el nombre actual, sino que aún se denominaba “La Puente de Don Gonzalo” o “Pontón de Don Gonzalo” y así consta en el archivo General del Obispado de Córdoba. El insigne escritor Pontano Don José Segundo Jiménez, incluye en una de sus publicaciones un fragmento de la carta del Vicario de La Puente al Obispado de Córdoba en Abril de 1819:

“ El Domingo pasado salieron unos cuantos muchachos vestidos de túnica y rostrillos, haciendo los mismos títeres que se hacen en Semana Santa. No llevaban la Imagen de Jesús , ni de su Madre y los estuve viendo pasear sus calles con estas mojigangas. Pero la envidia de otros o el celo por sus tradiciones o que no les habían convidado para que se vistieran de sayones, de profetas, etc . los apedrearon correspondiéndoles los de las vestimentas y se acabó a pedradas entre unos y otros. De aquí ha resultado que tres de dichos muchachos ( tendrían unos doce o trece años) con acompañamiento de otros quince.....vinieron como en diputación ha pedirme licencia para salir el próximo Domingo con formalidad para representando una procesión con Jesús Chiquito y su Madre Dolorosa y que enseguida iban a alcanzar o ya habían alcanzado licencia del Juez. ¡Son originales estas cosas !

Los reprendí y enseñe y fueron despachados sin enojo, pues les dije que era cosa prohibida por el Rey y por el Obispo y que las máscaras estaban recientemente prohibidas etc. Mejor hubieran entendido con un bapuleo que con palabras, pero yo conozco a estas obejas.....”

 

 

En sus inicios la Semana Santa Chiquita, consistía únicamente en la salida en procesión de unas pocas cruces que se mantenían en casa durante todo el año y que adornadas con flores y encajes, se sacaban en procesión por los chiquillos, para paulatinamente ir creciendo en cantidad y calidad con el paso de los tiempos. Se trata de una fiesta para los chiquillos, que finalmente terminan disfrutándola los padres, a la vez que sirve como despedida hasta el año próximo, de la Semana Santa Mayor.  

"Todo por los niños, dirán éllos"